Si hay alguien merecedor de una posición en este blog como reprensentante del cambio radical en cuanto a pelo se refiere, esa es DREW BARRYMORE. La actriz norteamericana lleva en nuestras vidas desde que tenía 3 años, aunque con siete alcanzó la fama mundial siendo esa niña angelical que acompañaba a E.T., el Extraterrestre. Desde entonces, y tras algún que otro coqueteo no recomendable con drogas y alcohol, una de las Reinas de la Comedia Romántica vuelve a las pantallas con Going To the Distance, con su ahora-si-ahora-no-novio (si no lo quiere, por aquí es bienvenido) Justin Long. Desde aquí nos confesamos admiradoras de su trabajo. ¿Quién no ha visto Nunca me han besado o ha alucinado con el atuendo viril del principe de Por siempre jamás?
Pero dejando atrás su pequeña biografía, la verdad es que Drew ha probado todo. Pelo largo, corto, liso o rizado; con flequillo y sin él, con los colores rojo, castaño oscuro, castaño caramelo, negro, rubio platino, rubio dorado, mechas, extensiones, cardados a lo años 60... y un largo etcétera, salvo el pelo rapado (cosa que dudo dado lo malos que fueron los 80). ¿Nuestro favorito? El actual. A una de las últimas fiestas de Nylon Magazine (En la que actriz protagoniza el número especial sobre el denim, leer aquí), Drew apareció con una larga melena castaña dorada brillante, con las raices combinadas en su tono natural.
¿Qué os parece?