O de como los vampiros brillan más que nunca.
Hoy aprovecharé la entrada para hablar de mi sesión de cine del fin de semana. Y es que el viernes, como ya sabréis todos por lo que han bombardeado en tv, revistas, foros, etc., se estrenaba la última entrega de la famosa saga “Crepúsculo”. El título de la misma es “Amanecer. Parte 1”. Por lo que tengo entendido, han dividido el último libro de la saga en dos partes (ya sabéis: a más pelis, más recaudación); así que si vais a ver la peli, no esperéis un final propiamente dicho, si no un “continuará” que, para ser sincera, a mí me dejó en vilo y con ganas de más. Pero tendremos que aguantar hasta Noviembre de 2012, que será cuando estrenen la segunda parte de “Amanecer”, y la última peli de la saga, esperemos que con un final feliz.
La peli es el típico pastelito que nos gusta a nosotras y nos hace soñar con que algún día conseguiremos un amor como el que se procesan los protas; y de paso nos alegramos la vista con algunos de ellos. Además, los paisajes y escenarios son bonitos y la trama es interesante; y al final, cuando te das cuenta, han pasado más de dos horas y se ha terminado la peli, y sientes que “quieres más”. Al menos eso es lo que me pasó ayer. Y eso que yo no me declaro fan de la saga “Crepúsculo”, pero debo admitir que he visto todas las entregas (las dos últimas ya en cine), y que me ha ido gustando más a medida que ha ido avanzando la historia. Ni qué decir tiene que deleitarse viendo a uno de los actores principales, Taylor Lautner, más conocido como “el lobo” de la peli, juega un papel muy importante (que en este blog somos Team Taylor a tope) La pregunta que más he oido: ¿Y este chico no tiene camisetas o que?
En definitiva, creo que la película es más que aceptable si eres fan de la saga de los vampiros luminosos: pasas 2 horas entretenida, viendo chicos guapos, con un hilo más o menos interesante para lo que es. Emociones, sentimientos, alegrías, tristezas… puedes hasta derramar alguna lagrimita en alguna que otra parte si eres fan hasta la muerte. Vaya, que si te gustan las películas románticas, que hablan de amores perfectos (o casi), y de personajes que se quieren por encima de todo y en las que el amor es suficiente para superar cualquier obstáculo entre ellos, puedes ir a verla. También es cierto que, tal y como está el cine últimamente, pagar casi 8 euros por cada peli ha hecho que dejemos el cine para las películas “de acción” o de “efectos especiales”, que es donde se nota el sonido y la gran pantalla del cine (aunque para mí, ver al lobito en tamaño super grande también me sirve, jeje!). Ya sea en casa o en el cine, creo que ésta peli no está mal, por encima de muchas películas románticas similares. Yo, desde luego, veré la segunda parte ;)
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