Se me ha ocurrido fijarme bien en este muchacho, y como ha cambiado desde sus tiempos en High School Musical, ¿no? Está como que muy bien.
Zac Efron protagoniza la portada de la revista BlackBook (mi favorita en cuanto a especiales y fotografía de moda junto con Nylon) y el fotógrafo Doug Inglish se ha encargado del reportaje, que me recuerda a una de esas sesiones locas y bizarras de Tyra Banks en American Next Top Model.
Quiero decir, vale que el tema es "Zac Efron es un animal" pero... Bueno, no sé.
Citas interesantes en le entrevista:
"Como un hombre viendo a Zac Efron, no me gusto demasiado aún. Asi que, ¿cómo me podría gustar Zac Efron? Quizá, si ese tío quisiera agitar un poco las cosas, hacer lo que no se espera de él, si no tuviese miedo de ser un estúpido, si no tuviese miedo de caerse de bruces, si estuviese por ahí lo suficiente como para tener todo el trabajo hecho, quizá algún día podría respetarlo."
Curioso modo de verse a sí mismo.
Sobre su último trabajo, el bodrio "Charlie St. Cloud" tipo Nicholas Sparks sin Ryan Gosling:
"Para la época de Charlie St. Cloud estaba confuso. No lo hice por dinero, no necesitaba más. No estaba allí por fama, no la disfrutaba. Estaba allí por el arte."
El chico es profundo. Y el caso es que se está poniendo cachas, ha mejorado horrores desde su ruptura con Vanessa Hudgens (no significa n-a-d-a, queridas fans). Lo veo como un futuro DiCaprio, pero sin los papeles no Oscarizados de Scorsese.
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