Desde la gala del MET del 2010 no me había divertido tanto. La gala, ese mega evento que organiza la directora del Vogue USA, Anna Wintour, que dice quién es quién -y de qué manera- en el mundo de la moda. Por eso quizá le prohibieron la entrada a Kim Kardashian, quién sabe (que no a Kanye West)
Pero yendo al lío, la que más me gustó, con diferencia, fue Solange Knowles, la hermanísima de Beyoncé, con ese estilo funky suyo. Vestido sencillo, amarillo impactante, de Rachel Roy. Por eso, gana de calle al resto.
Camilla Belle no se le queda muy atrás, si no empatada (desde que dejó a Joe Jonas como derrocha glamour, la muchacha); y otra de las reinas del sparkling esa noche fue Gisele Bündchen. Marfil y azabache, ¿con cual os quedáis?
Y hablando de colores impactantes como el de Solange Knowles, el vestidazo estilo helénico de naranja de Katharine McPhee (Smash) fue todo un acierto; y con algo de controversia -yo me declino por el sí- el rojo corto de Emma Stone.
Y quiero recalcar vuestra atención el el Givenchy haute couture de Beyoncé. ¿Ese cuerpo ha parido?
Fotos: Getty, The Superficial.
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