O de cómo crear polémica cuando una de tus modelos quiere defenderte. La modelo Charlotte Free intentó responder a las acusaciones de que el fotógrafo de las celebrities Terry Richardson (sí, el que siempre saca bien a Lindsay Lohan)
Se ha venido diciendo y algunas modelos han acusado al polémico fotógrafo de acosar sexualmente a sus fotografiadas (especialmente modelos) insinuando que él mismo pide favores sexuales durante las sesiones fotográficas.
En un comentario ya borrado de Tumblr, la modelo respondía así (vía The Fashion Spot):
"A Terry le gusta hacer cosas sexies, esa es su mierda. Si no quieres formar parte de ello, sé claro desde el principio. No vayas conscientemente y luego enfádate y siéntete humillado... Odio cuando las chicas dicen ofendidas "sí, pero él me pidió que lo hiciese". Tendrías que haber dicho que no entonces, p*ta estúpida! Hay un montón de chicas esperando en fila, él no te está forzando a hacer nada. Cuando eliges algo tienes que vivir con ello- a menos que alguien te la juegue en contra de tu voluntad."
Palabras que no han sido precisamente acertadas para la defensa del fotógrafo, que hay que decir que nunca ha tenido una demanda real encima de la mesa. El problema no está en la defensa de tu amigo, lo que (en mi opinión) sí que es un problema es la idea de que si tú no le sigues el rollo, hay mil chicas buscando una oportunidad que sí lo harán.
Otras modelos como Anja Rubik, Kate Moss o Kate Upton; cantantes como Beyoncé, Lady Gaga, Lana del Rey, Kanye West, Lil'Wayne o Gwen Stefani; actrices como Lindsay Lohan, Mila Kunis, las hermanas Dakota y Elle Fanning, Christian Bale, su muso Jared Leto o Penélope Cruz; e incluso personalidades como Oprah Winfrey o el Presidente Barack Obama también han posado para él. Yo misma no voy a esconder que soy fan (él mismo tiene una sección en este mi blog). ¿Sexy? Sí. ¿Buen fotógrafo? También ¿El típico hombrecillo del que te apartarías porque da un poco de cosilla? Desde luego, para qué negarlo.
Pero recordemos que sus polémicas portadas siempre son de las más vendidas (¿os acordáis de la portada subidita de tono de los actores de Glee para la revista GQ? ¿O de las portadas de Rihanna y Beyoncé? ¿O de Lady Gaga cubierta de carne para Vogue Japón?) debido precisamente a la controversia. Ahora bien, en caso de que estas acusaciones sean reales, las modelos afectadas deberían salir de las habitaciones del Château Marmont o de su estudio e ir directamente a la policía. Recordemos que las modelos no tienen un sindicato, y el tráfico sexual de menores no es algo que se deba tomar a la ligera.
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